¿CUÁNDO DEBE EMPEZAR UN NIÑO A MONTAR EN BICICLETA?

Si se trata de una bicicleta de equilibrio, te sorprenderá saber a qué edad

Cuando Michael Natividad aprendió a andar en bicicleta a los 7 u 8 años, sabía que sus ruedas de entrenamiento estaban listas para salir cuando se apoyaba en ellas al tomar las curvas.

Su hija, por otro lado, tenía apenas 3 años cuando se alejó de él en su pequeña bicicleta, dijo, admitiendo que se sintió un poco privado de un momento especial.

“No dejaba de pensar en esa oportunidad que la estaba sosteniendo, pero lo hice durante un minuto”, dijo Natividad, de Rohnert Park, California. “Estuve esperando eso durante tres años”.

Una gran diferencia fue que Loralani, que ahora tiene 4 años, nunca usó rueditas de entrenamiento. En cambio, como un número cada vez mayor de niños, aprendió a andar en bicicleta de equilibrio por primera vez, alrededor de los 2 años.

Las bicicletas de equilibrio parecen bicicletas en miniatura sin pedales. El asiento ajustable se puede bajar para que los niños puedan poner los pies en el suelo. Algunos modelos vienen con pedales acoplables, por lo que los niños pueden usarlas como su primera bicicleta real cuando estén listos.

Ahora bien, cuando algunas empresas comercializan bicicletas de equilibrio para niños de tan solo 8 meses de edad, la pregunta es ¿a qué edad deben los niños aprender a andar en bicicleta?

No todo es cuestión de la edad del calendario

Annie Pezalla, profesora de desarrollo humano en Macalester College en St. Paul, Minnesota, dijo que el marcador de los 8 meses «me sorprendió», pero vio la lógica detrás de la afirmación. Esto se debe a que la parte del cerebro responsable en gran medida de la coordinación, el cerebelo, atraviesa un gran período de crecimiento entre los 6 y los 8 meses.

Aun así, Pezalla recomendó tener cuidado. En lugar de una edad en particular, dijo, es más importante considerar los hitos que ocurren en diferentes momentos para diferentes niños, como mantener la cabeza erguida por sí solo y dar algunos pasos mientras se agarra a algo.

«Una vez que se alcanzan esos hitos, entonces creo que es el momento perfecto para subirse a una de esas bicicletas de equilibrio», dijo, señalando que generalmente ocurren entre los 9 y 18 meses.

Añadió la advertencia de que los primeros intentos deben realizarse en un espacio muy seguro, como una habitación alfombrada.

¿Qué pasa con las ruedas de entrenamiento?

Pezalla dijo que las rueditas de entrenamiento están pasando de moda porque no enseñan la propiocepción, la capacidad del cuerpo de entender dónde se encuentra en el espacio. Es lo que permite, por ejemplo, caminar sin pensar en cada paso. Por eso, cuando se quitan las rueditas de entrenamiento, los niños tienen que volver a aprender a mantener el equilibrio.

Según Cristiana Mercê, profesora de Ciencias del Deporte de la Universidad Politécnica de Santarém (Portugal), las investigaciones también demuestran que los niños que empiezan con bicicletas sin pedales tienen ventaja. En cinco estudios publicados sobre bicicletas sin pedales, Mercê y su equipo han demostrado que los usuarios de bicicletas sin pedales aprenden a montar en bicicletas normales en menos tiempo, y hasta dos años antes, que sus compañeros que usan rueditas.

Las bicicletas con rueditas de entrenamiento son demasiado grandes para la mayoría de los niños pequeños. Las bicicletas de equilibrio ofrecen la oportunidad de explorar muchas conductas que las rueditas de entrenamiento no permiten, como empujar con ambos pies, con un pie y deslizarse sin pedalear, dijo.

La variedad de movimientos facilita la transición a la bicicleta tradicional, dijo Mercê. “Se puede mantener el equilibrio sin pedalear, pero no se puede pedalear sin mantener el equilibrio”.

¿Cuándo debe un niño cambiar a una bicicleta de pedales?

Las pautas para el uso de bicicletas de la Academia Estadounidense de Pediatría no especifican una edad, sino que dicen que la mayoría de los niños aprenden a andar en bicicleta a su propio ritmo entre los 4 y los 7 años. Advierte explícitamente contra “comprar una bicicleta más grande para que el niño ‘crezca’”.

Pero estas directrices no se han actualizado desde 2011, años antes de que las bicicletas de equilibrio se volvieran más populares.

En cuanto al rango de edad de la AAP, Pezalla dijo que la transición a una bicicleta de pedales probablemente ocurrirá como una progresión natural con poca instrucción. Al principio, los niños se sientan y caminan con la bicicleta de equilibrio, luego se sientan y caminan y, finalmente, corren, se sientan y se deslizan.

“Debe hacerse por etapas, sin expectativas de que, por Dios, un bebé de ocho meses se vaya a deslizar sobre esta cosa”, dijo.

Después de eso, la diferencia entre deslizarse y pedalear es insignificante, dijo Pezalla, y señaló que le hubiera gustado haber sabido enseñar a sus hijos gemelos de 10 años a andar en bicicletas de equilibrio. Aprender estas habilidades motoras a temprana edad conlleva varios beneficios que trascienden una nueva forma de desplazarse.

“Representa una gran independencia y confianza en uno mismo de una manera que no es posible de ninguna otra manera”, afirmó. “Y creo que enseñar a los niños a andar en bicicleta desde una edad temprana tiene todo tipo de beneficios, no solo para su coordinación y su equilibrio, sino también para su sentido de la confianza en sí mismos y su autonomía”.

NOTA DEL EDITOR: Albert Stumm escribe sobre comida, viajes y bienestar. Puede encontrar su obra en https://www.albertstumm.com

(Nota cortesía tomada del portal digital de la Agencia AP en Español).